Sección 3

Ofrecer oportunidades educativas como alternativa al trabajo infantil

Panorama general

Para retirar a los niños del trabajo infantil en los campos de algodón y garantizar su reinserción en la escuela, el proyecto CLEAR Cotton colaboró con los Ministerios de Educación y los socios locales a fin de poner en marcha programas de reintegración escolar en Malí, Burkina Faso y el Pakistán.

En Malí y Burkina Faso, en el marco de la estrategia de escolarización acelerada (Stratégie de scolarisation accélérée – passerelle – SSA/P), se inscribió a los niños en situación de trabajo infantil, o que corrían el riesgo de estarlo, en centros educativos especialmente creados a tal efecto. Los niños recibieron un curso de educación acelerada de un año que les permitió adquirir las competencias y los conocimientos básicos para (re)integrarse en las escuelas ordinarias

En el Pakistán, un modelo similar de educación no formal ofreció una versión acelerada de la educación primaria en un programa de 3 años, con el fin de preparar a los niños retirados del trabajo infantil para los exámenes de nivel primario.

Síntesis de los resultados

Se crearon 142 centros educativos: 40 en Burkina Faso, 60 en Malí y 42 en el Pakistán.

4.356 niños fueron inscritos los centros: 1.097 en Burkina Faso, 1576 en Malí y 1.683 en el Pakistán.

3.306 niños fueron (re)integrados en escuelas ordinarias: 978 en Burkina Faso, 1.422 en Malí y 566 en el Pakistán (y 340 sigue yendo en los centros).

1.473 niños de 14 a 17 años fueron retirados del trabajo infantil y se garantizó su reinserción en la sociedad mediante la formación profesional: 705 en Burkina Faso, 543 en Malí, 225 en Pakistán.

Regreso a la escuela

En 2020, los avances mundiales contra el trabajo infantil se estancaron por primera vez en más de dos décadas. 160 millones de niños seguían en situación de trabajo infantil y 79 millones realizaban trabajos peligrosos. Esto suponía una amenaza para el objetivo de desarrollo sostenible de poner fin al trabajo infantil en todas sus formas. 

El 71 por ciento del trabajo infantil se concentra en la agricultura, y el sector del algodón no es la excepción. Para cambiar esta situación, el proyecto CLEAR Cotton contribuyó a los esfuerzos nacionales para eliminar el trabajo infantil de los sectores del algodón, textil y confecciones en las principales regiones productoras de algodón de Burkina Faso, Malí y el Pakistán. Para alcanzar este objetivo, el proyecto se centra en la educación y la adquisición de competencias que permitan ayudar a los beneficiarios a salir del círculo de la pobreza. Con la educación, los niños adquieren las herramientas y las competencias necesarias para encontrar un trabajo digno y vivir mejor.

Con el fin de redoblar esfuerzos para mantener a los niños en las escuelas y lejos de los campos, la estrategia de escolarización acelerada (SSA/P), un programa de enseñanza creado por la ONG Stromme Foundation, fue adoptada por los Gobiernos de Burkina Faso y Malí para llegar a los niños en situación de trabajo infantil, o que corrían el riesgo de estarlo.

En Burkina Faso y Malí, la estrategia de escolarización acelerada ya llevaba varios años aplicándose bajo la supervisión del Ministerio de Educación respectivo. El proyecto contribuyó a ampliar el programa a las zonas algodoneras. En primer lugar, se realizaron evaluaciones para identificar a los niños en situación de trabajo infantil, o que corrían el riesgo de estarlo, en colaboración con las autoridades públicas locales y las comunidades. Seguidamente, se llevaron a cabo sesiones de sensibilización dirigidas a los padres, los comités de gestión y las comunidades sobre los peligros del trabajo infantil. Los animadores de los centros (profesores) recibieron una formación tras la cual los centros abrieron sus puertas.

En Burkina Faso, la estrategia de escolarización acelerada fue puesta en marcha por la ONG Faso Action pour le Développement Communautaire (FDC). Se abrieron 40 nuevos centros en las comunas de Ouarkoye, Bondokuy y Dédougou. Un total de 1.097 niños, entre ellos 502 niñas, se inscribieron en los centros. También se crearon comités encargados de la vigilancia y el seguimiento del trabajo infantil en las localidades donde estaban ubicados los centros. En junio de 2022, en colaboración con la Secretaría Permanente de la Estrategia de Escolarización Acelerada del Ministerio de Educación y la Dirección de Lucha contra el Trabajo Infantil del Ministerio de Trabajo, se impartió una formación a las principales partes interesadas sobre la mejor manera de integrar y abordar las cuestiones relacionadas con el trabajo infantil en la SSA/P. El porcentaje de alumnos aprobados superó el 90 por ciento. Tras aprobar, los niños fueron trasladados a escuelas ordinarias para el siguiente año escolar.

«El proyecto permitió la escolarización de niños que estaban fuera de la escuela por diversas razones (trabajo en los campos de algodón, vulnerabilidad de los padres, desplazamiento debido a la inseguridad, etc.). De 2011 a 2022, el SSA/P ayudó a transferir a más de 100.000 niños que estaban fuera de la escuela a las escuelas [formales] después de 9 meses de enseñanza/aprendizaje. Con las escuelas cerradas por la inseguridad, el SSA/P aparece como una alternativa educativa en situaciones de emergencia.»

Sra. Cathérine KABORE, Secretaria Permanente de la Estrategia de Escolarización Acelerada (SSA/P), Gobierno del Burkina Faso

“Era pastor y también trabajaba en los campos de algodón. Desde que me incorporé al centro, ya no voy a los campos. Estoy contento porque adquiriré conocimientos y más adelante tendré un trabajo”.

Inoussa Kabore, beneficiario del proyecto de 11 años

David Sama, agricultor de Oulani (Burkina Faso), fue uno de los beneficiarios del proyecto. Para hacer frente a las exigencias de la agricultura y puesto que no tenía a nadie más que le ayudara, retiró a su hijo de la escuela. El proyecto sensibilizó a David Sama y comprendió por qué era importante que su hijo siguiera en la escuela. Su hijo Paulin se inscribió en un programa de SSA/P y terminó el primero de su clase. Comparte las respuestas que recibió del proyecto para sensibilizar a otros padres, para hacerles saber, en sus términos, que no está bien traer a un niño al mundo y pedirle que vaya a trabajar al campo. Para él, todos los niños deben ir a la escuela.

“Mi hijo no quería dejar la escuela, se negaba a obedecer. Pero como soy su padre, finalmente tuvo que hacer lo que yo le decía. Sin embargo, su comportamiento hacia mí cambió. Se mostraba enfadado conmigo porque le gustaba mucho la escuela. Así que le dije a su madre: ‘Si es así, lo pondré de nuevo en la escuela’.”

Sr. David Sama, agricultor, padre de un niño retirado del trabajo infantil

En Burkina Faso, el proyecto tuvo especial éxito gracias a la combinación de las oportunidades educativas con las transferencias condicionadas de efectivo de la FAO, una de cuyas condiciones era matricular y mantener a los hijos en la escuela.

En Malí, la estrategia de escolarización acelerada fue puesta en marcha por la ONG GRAADECOM. El proyecto ACCEL África de la OIT complementó las intervenciones de CLEAR Cotton con la creación de nuevos centros de escolarización acelerada en zonas de cultivo de algodón y de extracción de oro. En los 60 centros abiertos, 1.500 niños se beneficiaron del programa de escolarización acelerada, y 1.422 de ellos se integraron en escuelas ordinarias.

El programa SSA/P permitió que los niños abandonaran los campos de algodón. Es el caso de Aïssata Sanogo. A los nueve años, Aïssata trabajaba con sus padres en el campo de algodón, pero gracias al proyecto CLEAR Cotton pudo dejar de trabajar e ir al centro educativo. A principios del próximo año escolar, se incorporará al sistema escolar ordinario de su pueblo, Solomani Bougouni, en la región de Sikasso, al sur de Malí.

Debido a la pandemia de COVID, los centros tuvieron que cerrar en la primavera de 2020, pero reabrieron sus puertas varias semanas después organizando las clases en pequeños grupos por turnos. Los centros estaban equipados con lavamanos y los niños recibían mascarillas.

El Pakistán es el segundo país del mundo con mayor número de niños sin escolarizar. Muchos niños pakistaníes no pueden acceder a la educación por problemas de movilidad y acceso. Para llevar el aprendizaje al terreno, el proyecto CLEAR Cotton se asoció con el gobierno local y la ONG Bunyad Literacy Community Council (BLCC) a fin de crear centros educativos en las localidades en las que se encontraban los niños.

Otra forma de estrategia de escolarización acelerada se aplicó en 8 consejos de aldeas (Union Councils). En el marco de un plan aprobado por el Gobierno, la ONG BLCC creó 42 Centros de Recursos para el Trabajo Decente en el Sector del Algodón (DWCRC). A 1.683 niños de 5 a 15 años se les ofreció una versión acelerada de educación primaria a través de un programa de 3 años antes de su reinserción en la educación formal. 

Para obtener estos resultados, el proyecto trabajó con los padres, y especialmente con las madres. En las comunidades rurales del Pakistán, las mujeres siguen siendo las principales responsables del cuidado de los niños, y es más probable que destinen sus ingresos a las necesidades del hogar. Por esa razón, BLCC prestó apoyo específico a las madres, poniéndolas en contacto con las redes de seguridad social disponibles u ofreciéndoles clases de alfabetización. Las mujeres se convirtieron en agentes del cambio en sus comunidades. Como resultado, aumentó la matriculación de niños en las escuelas públicas, las comunidades pidieron más oportunidades de educación no formal y los padres se comprometieron a apoyar la educación de sus hijos y, en particular, de las niñas.

Formación profesional para niños mayores

En Burkina Faso, Malí y el Pakistán, se ofreció formación profesional a niños de 14 a 17 años retirados del trabajo infantil en la producción de algodón.

En Burkina Faso, el proyecto firmó tres acuerdos para la puesta en marcha de programas integrados de prevención, identificación y retirada de niños de 14 a 17 años en situación de trabajo infantil, o que corrían el riesgo de estarlo, en la cadena de valor del algodón, textil y confecciones. El apoyo a la reinserción socio-profesional de los niños retirados del trabajo infantil es el otro componente de estos acuerdos, en asociación con el proyecto de la OIT “Towards SDG 8.7”.

Las ONG Faso Action pour le Développement Communautaire (FDC), Coordination nationale des associations et jeunes travailleurs du Burkina (CN/AEJTB) (Coordinadora Nacional de Asociaciones y Juventudes Obreras de Burkina) y la Association No-Bièl identificaron a niños mayores en los campos de algodón mediante un proceso en el que participaron las cooperativas de productores de algodón y los servicios sociales locales. Para ello, se analizó la edad de los niños, su participación en la cadena de suministro del algodón, los tipos de actividades realizadas y su carga de trabajo. Se retiró a los niños del trabajo infantil y, en función de sus intereses, recibieron cursos de formación modulares de corta duración en ámbitos como la electricidad solar, el teñido, la fabricación de jabón y la cría de ganado pequeño.

Latifatou Ouedraogo es beneficiaria del programa de formación profesional del proyecto, en el que está aprendiendo costura. Latifatou, una niña burkinesa de 14 años, abandonó sus estudios en segundo de primaria cuando los terroristas cerraron su escuela. Huyó de la zona debido a la creciente inestabilidad y se instaló en Uagadugú, donde empezó a trabajar en una tienda de ropa de segunda mano. Tiempo después, Latifatou se convirtió en beneficiaria del proyecto CLEAR Cotton, escapando de la pobreza y el trabajo infantil.

“Desde pequeña soñaba con ser costurera. Gracias a este trabajo, podré tener una vida digna. Me sacará de la pobreza y mi familia y yo no tendremos por qué preocuparnos de nada”.

Latifatou Ouedraogo, beneficiaria de 14 años

Programas similares de formación profesional se llevaron a cabo en Malí, en colaboración con la ONG ALPHALOG, y en el Pakistán, con la ONG BLCC (Bunyad Literacy Community Council).